Les mostramos la nota hecha al Vicepresidente de Virreyes Marcos Julianes, fundador y vicepresidente del Club, con motivo del 1er GRan Triunfo del equipo de la primera.!!!!!.
Les hacemos llegar a todos nuestras felicitaciones de todos los que integramos el rugby del Bordóóóóó´!!!!.
Saludos para todos.
Los Entrenadores.
21-07-2010 00:24
Virrey de la ilusión
Marcos Julianes, fundador y vicepresidente de Virreyes, habló con Rugby Fun y contó sus sensaciones luego de la primera victoria oficial del club que debutó este año en el Grupo IV de la URBA. “Quería que se demuestren que ellos pueden”, dijo.
Virreyes Rugby Club comenzó hace siete años como un sueño, un deseo, algo que de a poco se fue acercando cada vez más a la realidad. Abrirle las puertas a quien más lo necesita, dar una mano, progresar. De eso se trata lo que pensaron Marcos Julianes y Carlos Ramallo cuando tomaron el ejemplo de la ovalada para formar y encaminar la vida de los chicos que hicieron del club su segundo hogar, “su lugar de pertenencia”, como explica Julianes, ex jugador y entrenador del CASI y actual vicepresidente de la institución que tiene su predio en el partido de San Fernando.
Es que la alegría brota por la sangre de este joven, humilde y sacrificado equipo que consiguió su primer triunfo oficial en el rugby de Buenos Aires el último sábado. Fue ante Beromama, en condición de visitante, por un emocionante y sufrido 44-36. Pero claro, esto es sólo un impulso más para seguir mejorando...
“De la primera para abajo hay una vida enorme en el club, pero que apunta a fortalecerlos en las cosas que más débiles tienen”, explica Julianes, quien amplía su visión: “nuestra población son chicos que van a escuelas públicas de bajos recursos y dan muchas ventajas a nivel educativo, cuando quieren entrar a la universidad hay mucha diferencia, entonces todos los aportes que estamos haciendo tienden a contrarrestar todo eso y que no haya tanta violencia en las carencias que los chicos van generándose día a día de los colegios”.
Primer triunfo oficial de Virreyes, ¿cómo vivió eso?
Fue una alegría muy grande, una emoción. Lo que pasó es que, como veníamos de muchas derrotas, lo viví más con los nervios de lograr un triunfo para los chicos, más que por la parte histórica de lo que significa el primer triunfo oficial. Estaba con la urgencia yo también de que ellos ganen un partido y se demuestren de que pueden, porque también habían perdido un par de partidos sobre la hora. El partido anterior contra Porteño íbamos ganando 24-5 y terminamos perdiendo 31-24. Además en este partido al referí le pasó algo en el reloj y no terminaba más, duró como 51 minutos el segundo tiempo, entonces decía “no me digas que vamos a perder de nuevo”. Pero por suerte pudimos, fue muy emocionante, algunos de los chicos lloraban de la emoción, sobre todo por el tema de sentir que pueden.
¿Qué resumen hace hasta acá de este primer año de Virreyes jugando oficialmente en la URBA?
Estamos muy contentos porque fue una jugada que pensamos mucho la de ir a Grupo IV o seguir en rugby buscando fichas, porque no es tan fácil cuando los chicos ya tienen 20 años, porque si vamos a jugar a Menores de 22 el nivel es muy superior y nos matan. Entonces la duda fue de esperar un poco más hasta juntar más plantel y al final lo hicimos. Por lo que va hasta ahora estamos contentos, porque por más que los chicos sean un año más grandes, el oficio de jugar un torneo, cuanto antes lo hagas en un sentido es mejor, porque el año que viene vamos a tener un plantel de 40 ó 45 con los de M 19, pero va a haber un grupo grande que va a tener el oficio del rugby, así que por ahora estamos muy contentos y sentimos que vamos progresando en lo individual, que los chicos van aprendiendo: en el contacto los primeros partidos perdían la pelota siempre, porque juegan contra hombres no contra chicos, y ahora sentimos que en esas pequeñas cositas se va viendo la mejora.
El bajo promedio de edad en la primera es algo bueno para trabajar en un gran proyecto a largo plazo...
Y vos pensá que hay un chico que se sumó que tiene 25, hay otro que tiene 23 y después son todos camada '89 y '90, así que tienen 21 y 20 años y hay algunos de 19. Así que es muy difícil jugar en rugby de mayores cuando tenés un promedio de edad de 20,5; realmente das mucha ventaja. Además pensá que los chicos nuestros tienen siete años de rugby encima, no es que la tienen re clara, ¿entendés? También dan ventaja en la experiencia, en la cantidad de partidos jugados en toda su vida... Son aspectos importantes.
Más allá de lo deportivo que pasa quizás a un segundo plano, ¿este proyecto está encaminado tal como lo habían pensado desde el inicio?
Superó todas las expectativas. Eramos dos cuando empezamos hace siete años, en poco tiempo se fue sumando gente. Hoy somos 50, tenemos un club maravilloso y sobre todo sirvió para disparar la parte educativa, que es lo más fuerte. El rugby sirve de trampolín porque es una enseñanza muy tangible, tenemos más de 200 chicos con tutores de seguimiento escolar, un pequeño colegio para primaria que nos banca Cadbury, con 15 chicos en la Universidad, todos jugando; es como que logramos ese famoso tema de que el rugby es una escuela de vida. Logramos hacerlo realidad, porque los chicos están mejorando mucho sus estudios, tienen un lugar de pertenencia, vos vas un sábado a la noche y se juntan a comer, el jueves a la noche terminamos a hacer un taller de valores y había 35 chicos que se quedaron a comer con los profesores.
Hablaba de la gente que se sumó; hay mucha gente de rugby laburando atrás de esto...
Sí, habría que hacer una cuenta porque entre tipos que vienen una vez por semana y los que viven ahí adentro... Digamos que debe haber 40 entrenadores más gente voluntaria. Pero gente de rugby tenemos de todos los clubes, desde Michingo O'Reilly o a Jorge hasta entrenadores de mucho nivel. El gran tema de los clubes es conseguir entrenadores; a nosotros también nos sigue siendo un recurso escaso, pero el día de hoy tenemos un promedio de un entrenador cada diez chicos, estamos muy bien. Esto es todo muy lindo, pero para que sea rugby tenés que tener gente de rugby. No tenemos padres que ayuden como en los clubes, entonces esa parte sigue siendo medio como crítica.
¿Siente el apoyo del resto de los clubes cada vez que van a jugar?
Absoluto. Esto no hubiera sido posible si no fuera por lo que nos apoyaron los clubes desde el minuto cero. Los clubes amigos como CUBA, CASI, SIC fueron los que empezaron, pero atrás de ellos vinieron todos y si tuvimos una experiencia negativa no tiene sentido mencionarla porque hubo mil positivas. Tanto cuando vamos a jugar con el primer equipo como cuando recibimos, sabemos que esto es de todos porque se hizo gracias a que todos nos bancaron y nos jugaron. Tratamos de sostenerlo y mantenerlo y no nos vamos a olvidar nunca de eso, porque no hubiera sido posible si no fuera que en los clubes nos jugaron y nos recibieron como lo hicieron.
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